La rescisión en 2006 del contrato de operación de Occidental Petroleum Corporation (OXY) en un bloque amazónico por parte del Gobierno de Ecuador desembocó en este largo arbitraje que ha encadenado diversos procedimientos y que dista mucho de verse finalizado.
La transnacional petrolera con registro en Barbados sigue buscando la anulación del laudo que asciende a 392 millones de dólares ante un tribunal estadounidense argumentando que las relaciones entre uno de los árbitros -precisamente el árbitro designado por ella- y el abogado que dirigía la estrategia de Andes Petroleum no fueron reveladas.
OXY sigue denunciando el conflicto de intereses entre Laurence Shore, abogado de Andes, y Smit, ya que no tuvo conocimiento de que ambos eran co-árbitros en un panel de la corte de arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional, al mismo tiempo que participaban del arbitraje entre ambas compañías ante la American Arbitration Association (AAA).
Para OXY la relación entre Shore y Smit que se alargó durante varios años en otro procedimiento minó todo el proceso.
El tribunal de la AAA estuvo formado por James Hosking, Robert Smit y Richard Ziegler en 2020.
El origen de Occidental Petroleum v. Ecuador
Ecuador rescindió en 2006 el contrato de operación de Occidental en un bloque amazónico, imbuido, entre otros, por la presión de las comunidades indígenas respaldadas por diferentes movimientos sociales en el país, y tras la venta de la empresa de parte del proyecto a Andes Petroleum. Las operaciones en este bloque las heredó la compañía pública ecuatoriana Petroamazonas.