El fondo de financiación de litigios Deminor ha anunciado su apoyo a André Brasil en su demanda contra el Comité Paralímpico Internacional (IPC). Tras una revisión de 2018 del sistema de clasificación por la World Para Swimming (WPS), André Brasil fue reclasificado como no elegible para competir como atleta paralímpico, después de una carrera deportiva de 16 años y de haber participado con éxitos en los Juegos Paralímpicos de Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2016.
La reclasificación se produjo en 2019 y planteó cuestiones cruciales sobre la transparencia y la imparcialidad del proceso de clasificación de los paraatletas.
André Brasil y el Comité Paralímpico Brasileño (CBP) iniciaron acciones legales contra el IPC argumentando en su demanda que “el proceso de clasificación en el deporte paralímpico es fundamentalmente defectuoso y viola los derechos humanos, así como las leyes antimonopolio alemanas y europeas.”
Según el comunicado de Deminor: “Basándose en las normas de clasificación de 2018, el deportista fue clasificado como “no elegible” por un punto, mientras que las pruebas médicas demuestran que la clasificación era errónea. Dichas pruebas médicas no fueron tenidas en cuenta por el IPC. Las reglas prohíben a un atleta presentar pruebas médicas ante la Junta de Apelación de Clasificación del IPC para impugnar una decisión de clasificación.”
El IPC alegó que cambió las reglas de clasificación porque quería una clasificación en para-natación más fiable. Desde Deminor argumentan que el IPC nunca aportó ninguna prueba médica que justificara los cambios en las normas, que tampoco hubo una participación significativa de los atletas en el cambio de reglas, ni se concedió un periodo de transición suficiente para que los atletas se adaptaran a los cambios de reglas.
André Brasil se retiró oficialmente de su deporte y continuó su lucha ante la justicia con un recurso en el Tribunal de Apelación de Düsseldorf, ampliando sus peticiones iniciales de reparación mediante la reclamación de daños y perjuicios por el final repentino e involuntario de su carrera. En una sentencia histórica, el Tribunal sostuvo que el IPC tenía la obligación de conceder al deportista un período de gracia suficiente para prepararle para el cambio de reglas y su posible inelegibilidad. Condenó al IPC a pagar daños y perjuicios a Brasil.
El IPC no ha aceptado la decisión y pretende recurrirla ante el Tribunal Federal de Justicia, pendiente de admisión.
Deminor se posiciona en la lucha del deportista por la equidad y la inclusión y expresa que “las creencias fundacionales y el propósito de Deminor se encuentran en el nombre de la empresa, derivado del término francés “défense des minoritaires”, que refleja su compromiso con la búsqueda de buenas causas y su determinación de restablecer la justicia.”
Según la biografía recogida de la página web del deportista, a los dos meses de edad, André Brasil fue diagnosticado de poliomielitis (parálisis infantil) tras una reacción a la vacuna. La enfermedad le dejó una discapacidad en la pierna izquierda. Pasó su infancia en hospitales y hasta los ocho años se sometió a siete operaciones, diversas terapias experimentales, mucha natación y fisioterapia casi a diario.
