“Una era disruptiva presagia una nueva oleada de disputas utilizando marcos bien establecidos para el arbitraje comercial y de inversiones“. Para los autores del informe “El arbitraje en América Latina en transición” -“Latin American Arbitration in transition“-, englobado en “Latin American Focus: Fall 2021” de la firma White & Case, el arbitraje está bien arraigado en América Lativa y se trata de un mecanismo clave en los conflictos internacionales que se fraguan en la región con motivo del momento vivido a escala mundial fruto de la pandemia Covid19 en conjunción con el periodo político y social actual.
“América Latina se enfrenta a una perturbación a una escala que no se había visto en tres décadas debido a la confluencia de la pandemia mundial, las consecuencias de años de escándalos y las cambiantes perspectivas políticas sobre la globalización”. Así comienza el análisis que desde el inicio concluye que “el arbitraje seguirá siendo el mecanismo preferido para resolver las disputas resultantes”, porque, a diferencia de lo que ocurría en la década de los años 90, ahora esta figura de resolución de disputas está mucho más afianzada.
La publicación destaca cómo los diferentes públicos del arbitraje deben prepararse para los nuevos cambios: las instituciones reforzando sus normas y sus prácticas; las partes considerando tomar medidas para prepararse mejor para las próximas disputas, que incluirían, entre otros: revisar cláusulas o “evaluar, asegurar y proteger las protecciones internacionales de las inversiones” [traducción propia].
El informe se focaliza, entre otros, en el impacto de la pandemia en las economías y en la compleja política nacional, que junto a las tendencias de globalización provocará cambios en las disputas comerciales y de inversión de la región.
“Latin American Arbitration in transition” ha sido elaborado por Jonathan C. Hamilton, Ank Santens, Viviana Méndez y Estefanía San Juan.
