Para Herfried Wöss (Wöss & Partners, S.C.), en 2024 va a haber un aumento significativo de litigios y arbitrajes relacionados con el tema del cambio climático y los criterios ESG –Environmental (medio ambiente), Social (sociedad) y Governance (gobierno corporativo)- tema que cada vez se vuelve más importante. Wöss destaca también la importancia del debate en torno a las reformas del arbitraje inversor Estado desde Naciones Unidas.
Así mismo será interesante observar el desarrollo de las actividades de reformas del sistema de arbitraje inversor Estado (ISDS) en el foro del Grupo de Trabajo III de la Comisión de Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional (UNCITRAL). Está cristalizando la posición de los Estados frente a la justicia “aristoteliana” de la compensación justa y equitativa de violaciones a los estándares internacionales de protección de inversiones, en vista de los quince casos excepcionales (según estudios publicados por el British Institute of International and Comparative Law (BIICL) y del Transnational Dispute Management (TDM) que llegaron a condenas multi-billonarias y que comentamos en nuestros “expert comments” que presentó el Prof. Don Wallace, Jr., presidente del International Law Institute en Washington DC, al Grupo de Trabajo III.
Al respecto será interesante la reacción a reportes como el del special rapporteur de las Naciones Unidas con el título “Paying polluters: the catastrophic consequences of investor-State dispute setttlement for climate and environment and human rights” que parece ignorar la flexibilidad y el desarrollo dinámico de los estándares de protección de inversión, así como la codificación reciente de tales estándares en la última generación de IIAs incluyendo el Tratado de la Carta de la Energía (TCE), reformado pero no firmado ni ratificado, para tomar en cuenta las necesidades legítimas de la lucha contra el cambio climático.