Juan Fernández-Armesto, presidente del tribunal del arbitraje entre la brasileña J&F y la compañía indonesia Paper Excellence, y Paulo Mota Pinto, coárbitro en el mismo panel, han renunciado a formar parte de la terna arbitral que decide sobre la controversia surgida por la compra de Eldorado, fabricante mundial de celulosa. Los árbitros denuncian amenazas por parte de J&F que les acusa de desobediencia, prevaricación y abuso de autoridad.
El procedimiento fue presentado por CA Investment, propietaria de Paper Excellence, ante la corte de arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional (CCI) en 2018, debido a los desacuerdos entre ambas compañías y al deseo de cancelar la venta de Eldorado por parte de J&F alegando que Paper Excellence había tardado más tiempo del acordado en realizar los pagos y cumplir con otras condiciones del acuerdo.
En su carta de renuncia, Fernández-Armesto expone que ha recibido “una amenaza directa, seria y verosímil” de una de las partes (J&F) y de sus abogados y que ante estos hechos su “única salida digna” es presentar la dimisión porque ya no se siente imparcial.
“Desafío a la justicia”
En una sentencia de 19 de septiembre, un juez de un tribunal regional federal, João Batista Pinto Silveira, confirmó la suspensión del arbitraje ordenada en otra sentencia de 30 de julio y todas las decisiones adoptadas por el tribunal arbitral desde esa fecha afirmando que: “el movimiento procesal privado del arbitraje, aunque supuestamente justificado por el objetivo de preservar el resultado útil del propio arbitraje, contradice una determinación judicial y, como allí se señala, desafía ahora otra decisión judicial que demuestre y aclare, definitivamente, la interpretación discordante” (ver “Árbitro do caso Eldorado renuncia apósitos decisão da Justiça“, Poder360, 23.09.2024).
La comunicación de J&F fue enviada el 18 de septiembre y Juan Fernández-Armesto renunció a formar parte del tribunal el pasado lunes.
Por su lado, Mota Pinto explica haciendo alusión a las causas de la dimisión de Fernández-Armesto y al recurso a la vía penal [J&F afirma que el árbitro incurriría en delitos de desobediencia, prevaricación y abuso de autoridad por no acatar la orden judicial], que considera las acusaciones infundadas y defiende que las decisiones arbitrales siempre pretenden respetar las decisiones de la justicia brasileña, pero que se ve obligado “a replantearme permanecer como árbitro en este procedimiento.”
J&F acusaba al tribunal del arbitraje, de violar las órdenes de la justicia brasileña al seguir con el procedimiento tras su suspensión el 30 de julio.
La designación de Fernández-Armesto y Mota Pinto ya había sido impugnada por J&F, denunciando la relación con abogados de Paper en el caso del primero o por su actividad política en el caso del segundo (ver “Itaú devolve açoes da Eldorado Celulose; disputa tem renúncias de árbitros“, Brasilagro, 25.09.2024).
Paper Excellence ha mostrado su disgusto con la actuación de J&F y en un comunicado expresa que las amenazas de J&F van encaminadas a forzar la dimisión de los árbitros para dilatar y aplazar la resolución. Para Paper, este asunto pone en peligro el debido proceso y daña la imagen de Brasil para los inversores.
J&F acusa a Fernández-Armesto de servir a los intereses de Paper Excellence y de verse obligado a dimitir cuando ya no podía cumplir con sus peticiones.
Paulo Mota Pinto y Luiz Henrique de Andrade, coárbitros del tribunal del arbitraje CCI, sustituyeron a Anderson Schreiber y a José Emilio Nunes Pinto que también renunciaron con anterioridad (ver “Presidente do tribunal arbitral do caso Eldorado renuncia após TRF-4 dizer que ele desafiava Justiça“, Metrópoles, 23.09.2024).