El Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones, Ciadi, ha publicado la composición del tribunal del arbitraje entre la constructora española Ortiz Construcciones y Proyectos SA y Argelia por desacuerdos relacionados con una fábrica de paneles prefabricados de hormigón. El presidente del tribunal será el suizo-brasileño Laurent Lévy, y los árbitros designados por las partes: el canadiense Yves Fortier (por Grupo Ortiz) y el belga Bernard Hanotiau (por Argelia).
La demanda fue registrada el pasada 24 de enero invocando el Tratado Bilateral de Inversiones España-Argelia de 1994, después de que el Ministerio de Vivienda argelino rompiera un acuerdo que databa de 2012 sobre la realización de otros proyectos urbanísticos (ver “Différend entre l’espagnol Ortiz et l’Algérie devant le CIRDI: l’arbitre en chef désigné”. Mahgreb Emergent. 30.06.2017). En declaraciones recogidas por este mismo medio -Mahgreb Emergement- y proporcionadas por Algérie Presse Service, se acusa a la constructora de no respetar las cláusulas del acuerdo relacionadas con los métodos y la elección de los equipos de construcción, así como de utilizar equipos obsoletos para la construcción de un megaproyecto de viviendas.
La defensa de la española corre a cargo de Herbert Smith Freehills (Madrid) y Argelia cuenta con el despacho argelino, con sede en Hydra, Chemloul & Associés.
El conflicto
El conflicto está relacionado con el proyecto de construcción de 5.000 viviendas en Argel en cinco años. Grupo Ortiz firmó un acuerdo en 2013 con la empresa argelina “Groupe Ola Construction SPA” para crear una sociedad argelino-española.
Indagsa, la empresa del Grupo Ortiz que lleva a cabo las obras, es la única empresa internacional con Sistema Constructivo de Viviendas homologado en Argelia (Avis Technique).
Para llevar a cabo el proyecto se construyó en el Harrach, Wilaya de Argel, una fábrica que produce paneles prefabricados de hormigón para conseguir 2.000 viviendas anuales. Ortiz recurre al arbitraje ante la exclusión y el rechazo por parte del Ministerio de Vivienda argelino para que opere en el país y, como consecuencia, continúe con los proyectos.







