La interacción humana requiere del establecimiento de normas de conducta para mantener un ambiente armónico y ordenado. Esta no es la excepción en las interacciones mediante video conferencia en nuestro sector: el arbitraje. Por el equipo de Real Hearing.
Los avances tecnológicos son continuos parteaguas en la historia de la humanidad. Quizá, uno de esos primeros avances fue la invención de la maquina de vapor en el siglo XVIII; invención que, de hecho, dio inicio a la primera revolución industrial. Desde ese momento, la forma en la que los seres humanos aplicamos la tecnología a nuestras actividades para generar plusvalía ha cambiado en infinidad de ocasiones; en los últimos años, incluso los cambios se dan día a día.
Ante esta situación, el impacto de la tecnología es innegable e imparable; nadie puede escapar de ella ni ignorarla si quiere permanecer vigente.
Si bien al principio no era muy claro la forma en la que debía realizarse la comunicación mediante estos medios tecnológicos; muy rápido se creó un consenso sobre las prácticas de etiqueta mínimas que deben de respetarse.
Las siguientes son algunas de ellas:
- Cada asistente debe identificarse con su nombre en la plataforma virtual.
- Solamente puede hablar una persona a la vez.
- Las personas que no hablen deben de silenciar sus micrófonos.
- En la medida de lo posible se debe evitar la interrupción de cualquier orador.
- Cada participante se debe de asegurar de que su conexión a internet sea estable y fuerte.
- Cuando una red de internet sea usada por más de una persona, cada uno de los usuarios debe hacer un uso responsable, racional y respetuoso de la conexión a internet.
- Evitar el uso de equipos que interfieran con la conectividad.
- Abstenerse de cualquier grabación de audio o video no autorizada.
Real Hearing, proveedor de servicio completo para audiencias de arbitraje, nació durante la pandemia de COVID-19, en respuesta a las necesidades del foro arbitral que trataba de adaptar el arbitraje a las nuevas circunstancias.
