Real Hearing. Tan real como en el tribunal


Ayer, 15 de marzo, tuvo lugar en la sede de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, CEOE, la presentación del Centro Iberoamericano de Arbitraje, CIAR, ante un nutrido grupo de empresarios.

El Centro Iberoamericano de Arbitraje colabora en la normalización de las relaciones empresariales

Joaquín Gay de Montellá, vicepresidente del CEOE y presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales, presentó el acto que tuvo lugar tras la Sesión Ordinaria de la Comisión que preside, y al que dio paso explicando cómo la iniciativa de creación del Centro Iberoamericano de Arbitraje formaba parte “de los compromisos del Ministerio de Justicia y de alrededor de 60 instituciones y que es bienvenido, ya que colabora en la normalización de las relaciones empresariales de toda la región”.

El presidente de CIAR, Luis Martí Mingarro, comenzó la presentación haciendo un repaso de los inicios del Centro y referencia a las Cumbres Iberoamericanas de Jefes de Estado y Gobierno que dieron el impulso definitivo hacia su formación, junto a la Secretaría General Iberoamericana, Segib y las, finalmente, 63 organizaciones firmantes, entre colegios de abogados y organizaciones empresariales. Martí Mingarro destacó las dos grandes virtudes que, a su juicio, visten al CIAR: “Una misma lengua y un entorno jurídico similar”.

Javier Íscar de Hoyos, secretario general del CIAR, explicó el por qué de un Centro de estas características para Iberoamérica “con la seguridad que ofrece un centro neutral, el apoyo recibido por la Segib y el compromiso de las 63 instituciones que tiene detrás“. El secretario general hizo referencia a las ventajas para las empresas como: la rentabilidad, la predictibilidad en coste y tiempos y la seguridad jurídica”, continuó desgranando las características del Centro de arbitraje, centrándose en:

  • la rapidez,
  • la calidad,
  • la especialidad,
  • lo económico de sus tasas (entre un 30 y un 60% más baratas que otras instituciones)
  • y la eficiencia buscada en el procedimiento.

El árbitro del CIAR debe ser independiente, imparcial y acreditar disponibilidad

Finalmente, Íscar de Hoyos se centró en la figura del árbitro CIAR al que describió como: “independiente, imparcial y con acreditada disponibilidad para cumplir los plazos establecidos por la institución”.

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