Javier F. Samaniego (Osborne Clarke) augura un buen año para el arbitraje en español reivindicando Madrid y Miami como sedes consolidadas para procedimientos internacionales. Para este experto, la mediación seguirá creciendo en 2024 y la Unión Europea debe definir “claramente” su alternativa al arbitraje de inversiones.
Como dice el proverbio: “Es difícil hacer predicciones, especialmente del futuro”, pero, en calidad de socio responsable de la nueva oficina de Osborne Clarke en Miami, mi previsión sería que en 2024 se seguirá con el debate abierto sobre la reforma del sistema de resolución de conflictos ISDS (Investor-State Dispute Settlement). Será interesante la dirección que vaya a darse por la nueva Secretaria General del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI) a la institución y esperemos que Europa defina claramente su posición. No tiene sentido poner en tela de juicio al CIADI sin dar alternativas concretas y realistas al sistema existente.
No tiene sentido poner en tela de juicio al CIADI sin dar alternativas concretas y realistas al sistema existente.
Creo que será un buen año para el arbitraje comercial internacional en lengua española donde espero que Madrid y Miami continúen consolidándose como sedes. De hecho, desde MIAS (Miami International Arbitration Society) se espera que, como ya ocurriese en 2021, Miami vuelva a igualar o superar a Nueva York en el número de arbitrajes con sede en esa ciudad y mi deseo es que el nuevo centro CIAM también administre arbitrajes con sede en esta plaza.
Tendremos que estar pendientes a las noticias que lleguen desde el Reino Unido tanto en la anunciada reforma de su sistema arbitral como la supuestamente inminente ratificación de la Convención de Singapur. De hecho, respecto a la mediación todo apunta a que 2024 será un año donde la mediación empresarial seguirá creciendo como alternativa a la vía judicial y arbitral.